miércoles, 19 de junio de 2019

Nos sumamos a este Hilo de Oro


De lo más interno y oculto de la caverna, del corazón del Ser o Agartha, se expande en espiral un encadenado de letras, el Fiat Lux despertador de las Potencias que atentos oídos escuchan y repiten y vuelven a recrear orquestando una sinfonía que ejecutan todos los integrantes de la Cadena Áurea. Ésta es nuestra minúscula contribución, sin pretensiones particulares sino como la expresión de la imperiosa necesidad de ser, de saborear la esencia de la Vida y de devolver lo aprehendido.

Nos sumamos a este Hilo de Oro, a las sagas de los antiquísimos Himnos Sumerios, seguidos por los que salmodiaron los Egipcios, los Órficos, los Homéricos, los del rey David, los de Proclo y los de innumerables cantores precolombinos como es el caso del gran rey tolteca Nezahualcoyótl, o entidades iniciáticas de distintas tradiciones que a lo largo del tiempo han entonado tantos himnos de agradecimiento y de vivificación de la Memoria y el Dios Desconocido. (...)

Inspirados por las palabras de nuestro guía, levantemos las copas y brindemos:

Los herederos de los bardos nos hemos declarado en huelga, se proclama la rebelión de los poetas, un tono gremial empapa esta página. La urgencia de actuar inmediatamente, con velocidad fugaz, en minúsculos toques de atención para que la humanidad despierte. La imperiosa necesidad de un metalenguaje que genere otros códigos, para que el poeta pueda cumplir tan noble como antiguo oficio. ¡Devuélvase al bardo el don de la profecía! ¡Que se sepa que somos un honorable personal jerarquizado y que nuestros antecedentes son sagrados! Venimos de la casta de Homero, de Virgilio, de Dante, de la de los trovadores de todos los pueblos. Señores, formemos una corporación parlante, una estructura audible. Una organización sonora que sea como un templo, como una caja de resonancia, para que la Inspiración pueda recibirse y la Música y la Poesía se expandan por el Mundo entero (1).


Desde el Agartha, invisible como el centro de la rueda, se salvaguarda esta enseñanza intemporal y se disparan las flechas hacia todo el contorno del círculo.

Al Agartha
Centro oculto,
centro de centros,
corazón de la montaña,
cúbrenos con tu manto estrellado,
protégenos dentro de tus linderos inviolables.
Al nombrarte, Agartha,
desaparecen todos los rostros,
las almas convocadas se saben instrumentos del Rey del Mundo,
y entonan un canto unánime.
Poderoso Legislador,
nos plegamos a tus designios.
Abandonando luchas y afanes,
nos adherimos a la Norma
e integrados en el plan divino
nos acercamos a la luz inmaterial
que se proyecta desde lo más interno de la ciudad subterránea.

Centro oculto,
centro de centros,
núcleo de inmortalidad,
aunque nos sabemos seres transitorios,
unos “tristes mierdas de origen divino” (2),
hacemos memoria día tras día
para mantener viva la llama que nunca se apaga,
salvaguardando el germen origen de cualquier eón
y la esencia indestructible no sujeta a los cambios.
Ignoramos el día y la hora del cierre de la función,
mas no desfallecemos en el empeño de encarnar el Ser
para soltarlo en un instante,
fugaz,
imprevisto,
por el que se cuele el rocío celeste
que haga resucitar de las viejas cenizas, un Mundo Nuevo.



1. Federico González, En el vientre de la ballena. Textos alquímicos.
2. La cita es de Federico González, Rapsodia.

Colección Aleteo de Mercurio 6.
Himnos del Agartha.
Textos del Ateneo del Agartha.
Ilustraciones de Ana Contreras.
Recientemente editado en abril del 2019 por Libros del Innombrable, Zaragoza.



miércoles, 5 de junio de 2019

Pensad en vuestro origen


Culmina la tercera velada de la Máscara Real, y con ella contemplamos el último grabado en el que aparece la sirena Parténope, la joven virgen frigia que había hecho votos de castidad; enamorada, no los quiere romper y se retira a la campiña de la región de Campania, consagrándose a Dioniso por siempre más. Afrodita la acaba transformando en Sirena. También entra de nuevo en escena Ulises que nos viene a recordar las palabras que dirige a su tripulación, y que Dante así escribe en su Divina Comedia:

—Pensad, pensad en vuestro origen. Vosotros no habéis nacido para vivir como brutos, sino para alcanzar virtud y conocimiento. Con esta corta arenga infundí en mis compañeros tal deseo de continuar el viaje que apenas los hubiera podido detener después. Y volviendo a la popa hacia el oriente, de nuestros remos hicimos alas para seguir tan desatendido viaje... (1).

Así, pensando en nuestro origen e interesados solamente en realizar ese viaje espiritual, esa recuperación de un estado de la conciencia más allá de los mares del mundo intermediario, o del Alma del Mundo, nos subimos a la nave Argo, la negra nave que de ser beneficiada por la influencia de Neptuno, arribará a la tierra mítica que guarda el Vellocino de Oro. La Máscara Real concluye con el grabado de este navío al que se nos invita a subir, y a remar en dirección a una meta liberadora.

Impulsada por el viento, con las velas hinchadas, navegaba la Argo al amanecer, cuando la Aurora se encaminaba el mundo infinito, hacia la extremidad del Inhóspito (2).

Sabemos que las evocaciones sugeridas sobre los grabados de este libro pueden estar muy alejadas de las lecturas histórico-políticas-estéticas que se han hecho de esta Máscara Real, pero para nosotros esa es la grandeza del símbolo: su enseñanza no se enturbia, ni disminuye, ni desaparece por la estrechez de miras del observador. Es más, para aquél que se acerca totalmente permeable al potencial transmutador de la Vía Simbólica, puede ir descubriendo un discurso oculto, pero real, veraz, operativo y entroncado con una Sabiduría Perenne, que es la que alimenta todos los mitos evocados en los grabados; profundizar y meditar en el entramado que van tejiendo supone un rito altamente purificador. Estamos invitados, guiados por el soplo de Hermes... El vasto campo de la Cosmogonía se abre ante nosotros, rompiendo las barreras del tiempo y del espacio para conducirnos a un ámbito en el que todo es permanente actualidad. Seguirlo o no sólo depende de nuestra libre elección.

1. Dante. La Divina Comedia.
2. Porfirio. Argonáuticas Órficas.

Imagen:
Grabado de Franciscus Tramullas. 11ª. Lámina de la Mascarada Real.
1 Carro de Parthenope y Ulises, 2 Nave de Argos, 3 Templo de Neptuno.

Colección Aleteo de Mercurio 1.
La Mascara Real y su Simbólica.
Mireia Valls y Marc García.
Libros del Innombrable, marzo, 2017.